El camino

   Si a los 11 años nos tuviéramos que plantear abandonar el que, hasta ese momento, ha sido nuestro hogar y emprender una nueva vida lejos de padres, amigos, hermanos... como mínimo nos sucedería lo mismo que a Daniel en la noche anterior a su partida: nos costaría dormir. A esa temprana edad, "el Mochuelo" ve que su futuro inmediato le presenta una realidad que nada tiene que ver con el mundo al que está acostumbrado.

   Esta circunstancia le sirve a Delibes para presentarnos la frecuente dicotomía entre la vida rural y la de ciudad. ¿Qué ventajas tiene una sobre la otra? ¿Por cuál os decantáis? ¿Tiene sentido alejarte de tus seres queridos para emprender una aventura como la de Daniel? ¿Merece la pena el sacrificio de estudiar durante años?